PSICOLOGÍA: LA PREOCUPACIÓN
El ser humano es un ser pensante, es normal que pensemos y pensemos sobre las cosas que nos van pasando, esto es normal y adpatativo, pero algunas personas le dan muchas vueltas a la cabeza ante cualquier pequeña situación y las consecuencias de esto son nefastas: estancamiento, frustración, cansancio, ansiedad, dolores de cabeza y dificultad para dormir. Estas personas convierten lo simple en complicado, lo fácil en difícil y los pequeños problemas en grandes problemas.
Hay algunos trucos que nos pueden permitir relajarnos y dejar de estar continuamente preocupados.
Ser ambicioso es fantástico. Sin embargo disfrutar de las pequeñas cosas que se tiene es fantástico y esto nos permite seguir moviéndonos en una dirección que sabemos que es la correcta en lugar de permanecer parado hasta saber cuál es el siguiente paso perfecto. Un paseo, una buena conversación, un libro, una peli, centrándonos solo en eso sin dejarnos llevar por otros pensamientos y disfrutando del aquí y ahora, hará que pongamos nuestro marcador de estrés a cero.
En algunas ocasiones esperamos y analizamos profundamente todos los datos antes de tomar una decisión. La naturaleza de algunas decisiones impide que por mucho analizar una situación podamos averiguar cuál es la alternativa correcta. Deja de analizar y toma una decisión guiándote por la intuición. Se ha demostrado científicamente que la intuición es un poderoso mecanismo para tomar decisiones y tendríamos que dejarnos llevar más por ella, acertamos más veces.
Abandona la teoría y sumérgete en la práctica. Haz al menos una cosa cada día que te acerque un poco más a esa persona en la que te quieres convertir. No esperes a dominar una determinada habilidad antes de ponerla en práctica. Pre-ocuparse es ocuparse antes de tiempo. Si el problema tiene solución OCÚPATE, si no déjalo ir.
Una excelente manera de evitar pensar demasiado es crear un plan de acción y ajustarnos a él. Cuando tenemos un plan de acción y unas fechas para acabar un determinado proyecto no perdemos el tiempo pensando de más y nos focalizamos en el trabajo.
Eckhart Tolle en su libro “El poder del ahora” habla de encontrar ese lugar tranquilo y relajante más allá de tus pensamientos. Se trata de un lugar donde habitan la calma y la libertad. Encontrar este lugar requiere de un gran esfuerzo y entrenamiento. Pero, según dice el autor, una vez lo encuentres te será más fácil volver a él cada vez que quieras. No somos conscientes de lo difícil que es paralizar el pensamiento hasta que no lo hemos intentado. La meditación, relajación, yoga,… son una buena forma de parar pensamientos.
Si un pensamiento está ocupando tu cabeza y no te deja avanzar, d aun golpe en la mesa y grita BASTA !!!!!!! discute con el pensamiento y plantéate preguntas del tipo: ¿para que me sirve pensar así?, ¿esto que me preocupa se puede resolver? ¿pensaría lo mismo si estuviera en otro estado emocional más agradable? ¿de que depende que me sienta así? ¿del problema o de mi interpretación? ¿estoy teniendo una visión sesgada del problema? ¿como me siento pensando así?…
Reformula tu pensamiento
Ante una situación de incertidumbre puedo preguntarme “¿Y si sale mal?” La forma en la que está formulada esta pregunta puede generarme ansiedad ya que no se orienta a la solución. Por el contrario una pregunta correcta sería “¿De qué alternativas dispongo en caso de que salga mal?”. A pesar de que en el fondo ambas preguntas buscan lo mismo, la forma de la segunda pregunta está orientada a la búsqueda de soluciones.
Deja de pre-ocuparte y ocúpate !!!!!!
Mucho éxito y buena semana