El fin de semana de cena con una amiga nos pusimos a hablar sobre la maldad ¿es genética o adquirida? ¿el malvado nace o se hace? charla animada con una botella de vino en la que casi arreglamos el mundo, el caso es que al día siguiente me levanté con la curiosidad y al otro día y al otro,….. así que he decidido profundizar en esto un poco y compartir con todos vosotros. Las próximas semanas reflexiones sobre la maldad.
¿Un determinado ambiente puede convertir en malvada a una persona buena?
En este sentido son muy interesantes algunos experimentos, el de Milgram en el que una persona debía proporcionar descargas eléctricas a otra persona a la que no veía pero si escuchaba con la premisa de que era un experimento para mejorar la memoria a través del castigo, de forma que cuando se equivocaba en la respuesta le daba la descarga que se iba incrementando en cada respuesta errónea. Se preguntó a varios psiquiatras y psicólogos antes del experimento sobre cuantas personas creían que iban a dar la potencia máxima de descargas (450 v) sus respuestas fueron que como mucho un 1% y que serían personas con un perfil psicópata.
Los resultados fueron sorprendentes 2 de cada 3 personas normales ( no psicópatas) gente como tu y como yo llegaron a dar 450 v de descarga a un desconocido solo porque otra persona les decía que tenían que hacerlo.
Este hecho además de hacerme pensar en la maldad y en como cualquiera podemos convertirnos en verdugos en según que circunstancias me obliga a plantearme cosas como la educación de nuestros hijos e hijas, les enseñamos a ser obedientes porque si no tendrán un castigo o una consecuencia de forma que desarrollan una obediencia ciega a la autoridad en general ¿será esta la causa de que cuando una autoridad nos dice que hagamos algo malvado lo hagamos sin cuestionarnos si esta bien o mal como en el experimento de Milgram?
Buffff
PARTE II:
Continuamos esta semana reflexionando sobre la maldad, muchas gracias por las aportaciones y comentarios, han dado lugar a profundizar y debatir.
Esta semana os quería contar otro experimento en la linea del de Milgram, solo que esta vez es aún más siniestro si cabe porque no hay una figura de autoridad a quien obedecer.
Se trata del experimento de la cárcel de Stanford de Zimbardo con estudiantes de psicología. En los sótanos de la universidad se pretendía realizar durante 2 semanas un experimento en el que de un grupo de 24 estudiantes al azar se daba a la mitad el papel de preso y a la otra mitad el de carcelero, para que fuera más real los carceleros detenían a los presos por algún delito menor y los encarcelaban, el primer día había aparente calma, ni los presos ni los carceleros asumían su rol y todo se reducía aun juego, un experimento, pero a medida que fue pasando el segundo día y los siguientes los presos empezaron a sentirse culpables aún sabiendo que no habían hecho nada malo y montaron un motín ante el trato vejatorio que estaban sufriendo por parte de los carceleros de forma que éstos usaron la violencia para aplacarlos, a partir de ese momento el experimento se les fue de las manos y dejaron de ser simples estudiantes para convertirse en el papel que estaban representando.
Los carceleros vejaban, ridiculizaban y maltrataban patológicamente a los presos y estos desarrollaban una indefensión tal que algunos tuvieron que abandonar el experimento con graves problemas. Pero todos tenían tan asumido su papel que nadie, ni siquiera el propio Zimbardo que staba de observador eran capaces de acabar con el experimento, tuvo que ser una persona ajena al experimento quien pusiera fin a tal atrocidad.
Esta parte de infringir daño deliberado a otro porque creemos que se lo merece y lo comenzamos a ver como enemigo y lo despersonalizamos es loq ue más me asusta porque ¿que hubiéramos hecho cada uno de nosotros en cada uno de esos roles?
Parece que las personas nacen con la capacidad de ser buenas o malas pero ¿que hace que nos desarrollemos hacia la maldad o la bondad?
¿que crees tu?
PARTE III:
Para completar este ciclo sobre la maldad quería compartir con vosotros otro experimento también de Zimbardo llamado “las ventanas rotas” es una teoría que dice que la maldad y las conductas inmorales también se contagian.
El experimento consistía en que en un barrio pobre de Nueva York dejaban un coche abandonado sin matrículas y con las puertas abiertas.
A los tres días no quedaba nada de valor en el coche, lo habían saqueado, podemos pensar que puede tener que ver con la necesidad porque no deja de ser un barrio pobre pero el experimento fue más allá y dejaron un coche similar, de la misma marca, modelo,… en un barrio acomodado y pacífico, la primera semana no pasó nada pero Zimbardo decidió romper un ventana y martillear la carrocería, a partir de ahí todo cambió, al cabo de unas horas el coche estaba tan desvalijado como el del barrio pobre.
La teoría de las ventanas rotas dice que si un edificio aparece con una ventana rota y no se arregla pronto aparecerán otras ventanas rotas, si un grafiti no se borra, se pintarán más porque, al parecer, el hecho de ver algo roto lanza un mensaje a la sociedad: esto no lo cuida nadie y por alguna razón eso parece darnos pie a romper, maltratar, robar,….
La reflexión que me sugiere este experimento tiene que ver con el acoso, el bullying, el maltrato y esas conductas de maldad hacia otras personas y lo que supone que este daño no se repare en el momento.
Pienso en los niños y niñas que sufren acoso,maltrato, burlas y vejaciones en el colegio, esto sería un ventana rota al principio pero ¿que pasa si no se repara este daño rápidamente? pues que el resto entiende que a esta persona no la cuida nadie, que se puede maltratar y vejar y seguirán rompiendo todas las ventanas hasta que la persona está totalmente destruida; y lo hará no solo la persona que inició el acoso también el resto, algunos de forma activa y otros de forma pasiva pero todos participando…
¿y si reparamos esto cuanto antes?
Me gustaría saber vuestra opinión, animaros !!!!!!
Mucho éxito y buena semana